Hace algunos días hablábamos en este post de la propuesta del gobierno de aumentar el Impuesto sobre el Valor Añadido del 16 al 18 %. Esta semana, el gobierno ha conseguido los apoyos necesarios para que la propuesta se apruebe en el Congreso. Este fin de semana se está hablando mucho de si este aumento se repercutirá enteramente en los precios, y por lo tanto, lo pagaremos los consumidores, o lo asumirán las empresas, bajando sus beneficios. Tras el anuncio de Inditex del miércoles pasado de que no transladaría la subida al precio, Carrefour anunció (y por su volumen de ventas es fácil que otros le imiten- oligopolio de los supermercados) que sólo aumentarán los precios en aquellos productos que se venden con un margen de beneficio muy pequeño, y de otro modo se venderían con pérdidas.
Queda por ver como repercutirá finalmente esta medida en los precios. La vicepresidenta de Economía ha manifestado que cree que el aumento se atrasladará a los precios en un 50%, lo que hará que la inflación aumente en un 0,6 %, lo que no es preocupente en estos momentos porque la inflación se mantiene por debajo del 1 %. La paradoja es que a corto plazo el aumento del IVA puede hacer reducir los ingresos del Estado por este concepto, al provocar una caída del consumo, pero aumentarán cuando se consolide la recuperación económica. Se espera que entonces reduzca el défitit del estado, que en estos tiempos de crisis está alcanzando el 11 %. Y, aunque es una medida muy inpoplar, el Gobierno recuerda que el IVA en España sigue por debajo de la media Europea, que es el 20 %.
Como siempre hay que ver el lado positivo de las cosas, esto va a obligar a las empresas a ser más competitivas y a adaptarse a la demanda de los consumidores. Sólo sobrevivirán las empresas que sean más eficientes.
Léete la noticia completa para estar al día en economía.
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